viernes, 3 de septiembre de 2010

Endeudamiento juvenil.


 Con su breve vida –apenas 21 años-, Edita tiene varias deudas pendientes.
¿Quién da crédito bancario a una chica que recién estudia su tercer año de U. y no tiene siquiera una liquidación de sueldo?
Cierta entidad ha ofrecido un paquete promocional en su curso. Cuenta corriente y tarjeta de crédito asociada, previendo en ellos futuros profesionales y seguros clientes.

Una encuesta recién publicada asegura que el 50% de los jóvenes tiene deudas y morosidades.
Bueno, eso no es una novedad. Casi todos los chilenos las tienen. Y los que no, de repente son tentados ( y nos tentamos). Mucha oferta, mucho outlet, propaganda, ofertas, rebajas, el bombardeo mediático es impresionante.

Necesitas un alfiler, millones de todos colores y formas.
Quieres un auto, aquí, aquí, aquí ¿quién dijo yo?
¿No necesitas nada? No, no puede ser, ¿eres extraterrestre? Porque todos necesitamos algo y para toda necesidad hay un…crédito.

¿Cómo minimizar la manipulación del endeudamiento?

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“Paguen a cada uno lo que le corresponda:

si deben impuestos, paguen los impuestos;
si deben contribuciones, paguen las contribuciones;
al que deban respeto, muéstrenle respeto;
al que deban honor, ríndanle honor.

No tengan deudas pendientes con nadie,
a no ser la de amarse unos a otros”

(Romanos 13: 7-8 NVI)

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La noticia:
http://www.lasegunda.com/ediciononline/economia/detalle/index.asp?idnoticia=584520

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